Moscú.-Las autoridades rusas han anunciado este domingo que han repelido un ataque nocturno de Ucrania con al menos una decena de aviones no tripulados dirigidos contra la ciudad portuaria de Sebastopol, en la península de Crimea y base de la Flota rusa.
El gobernador de Sebastopol, Mijail Razvozhaev, ha asegurado que el ataque ha sido neutralizado gracias a los sistemas de defensa de la ciudad y que los efectivos de seguridad han hallado ya los restos de tres aviones no tripulados.
«Uno de ellos ha caído en un cinturón forestal, otro ha sido derribado sobre el mar y el tercero ha sido interceptado en los muelles del norte», ha hecho saber el gobernador en su cuenta de Telegram, en un mensaje recogido por la agencia rusa TASS.
El gobernador ha indicado que el ataque no ha dejado daños materiales en la ciudad y que los sistemas de defensa están activados para identificar nuevos asaltos.
Sebastopol, y la península de Crimea en general, es un objetivo destacado de las fuerzas ucranianas, que emplean aviones no tripulados y misiles para alcanzar a objetivos rusos. Este sábado, sin ir más lejos, defensas antiaéreas rusas derribaron dos misiles balísticos ucranianos sobre la región.
Mueren al menos dos personas tras un bombardeo ucraniano
Al menos dos personas han muerto este sábado tras un bombardeo del Ejército ucraniano a la ciudad de Donetsk, capital de la provincia homónima (este), en el que otros cuatro han resultado heridos, entre ellos un niño.
Las fuerzas ucranianas lanzaron 84 proyectiles del calibre 152 y 155 milímetros y otros 30 cohetes MLRS, según un comunicado en la cuenta de Telegram del alcalde de la ciudad, Alexéi Kulemzin.
Donetsk pertenece a la República Popular de Donetsk (RPD), autoproclamada como tal en 2014 tras el Euromaidán y anexionada por Rusia en octubre de 2022.
Las protestas del Euromaidán estallaron cuando Yanukovich rechazó en noviembre de 2013 un acuerdo con la Unión Europea para decantarse por un pacto con el Gobierno ruso a cambio de una importante ayuda económica. Las manifestaciones finalmente derivaron en la huída de Yanukovich.
Rusia, por su parte, se benefició del ambiente convulso en Ucrania para anexionarse la península de Crimea y apoyar abiertamente a los separatistas prorrusos de las regiones de Donetsk y Lugansk, en el Donbás ucraniano. Toda esta situación fue caldo de cultivo para la posterior invasión rusa de Ucrania en febrero de 2022.